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La exposición más pequeña del mundo

María Méndez Suárez, Héctor Archilla Segade, Telma Barrantes Fernández, Rafael Gil Ortega

Universidad de Extremadura

Instalación

2. Estado actual y nuevos caminos de internacionalización de la investigación en Educación Artística

Picasso, retrato, arte colaborativo, museo contemporáneo

El presente proyecto se enmarca dentro del 50 aniversario de la muerte de Picasso. Dicha temática fue el motor para la organización de ‘La exposición más pequeña del mundo’, titulada así por tener como requisito la realización de obras con un tamaño máximo de 11 x 11cm. A través del convenio firmado con el Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo (MEIAC) de Badajoz, hace ya dos años, 3 profesores del área de Didáctica de la Expresión Plástica y Musical, de la Facultad de Educación de Badajoz y un alumno de Doctorado, contactamos con varios CEIP de la provincia para ofrecerles participar en esta iniciativa. Se trataba de llevar al alumnado primero, a visitar el museo, con una visita guiada yconcertada y, después, darles un taller en su centro educativo. Los colegios que participaron fueron el CEIP Juan Vázquez y el CEIP Puente Real, los dos de la ciudad de Badajoz. Por un lado, los niños y niñas se inspiraron en una obra del museo pararealizar una producción libre de 11 x 11cm. Por otro lado, les impartimos un taller sobre Picasso, enseñándoles algunos de sus retratos y explicándoles unas nociones básicas sobre el cubismo. Se pusieron por parejas. Cada pareja se retrató mutuamente, pero si uno dibujaba al otro de frente, el otro dibujaba al primero de perfil. Así, conseguíamos la mitad de los retratos de frente y la otra mitad de perfil. Los colorearon de manera creativa usando multitud de colores y a continuación recortaron los ojos, la boca, el pelo, las orejas, nariz, etc. Se procedió a meterlo todo en una caja y mezclarlo. Cada estudiante se quedó con la base del retrato hecho y se le asignaron otros ojos, otra boca, otra nariz, etc., que pegaron como quisieron (no necesariamente en el lugar y/o la orientación que correspondía). De esta manera, aprendieron a trabajar de manera colaborativa, comprendiendo que para esta actividad no servía de nada trabajar de manera individual, ya que para que la obra cobrase sentido, necesitaban las partes de la cara dibujada por otros compañeros. Finalmente, la obra se llevó al MEIAC donde ha estado expuesta dos meses.

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